Mutismo selectivo y Autismo

Mutismo selectivo y autismo - ESPACIO AUTISMO

El autismo y el mutismo selectivo son dos trastornos distintos pero que pueden presentar algunas similitudes

En ocasiones el mutismo selectivo y el autismo pueden darse de forma simultánea

El mutismo selectivo es un trastorno de ansiedad que hace que las personas que lo sufren sean incapaces de hablar en determinadas situaciones.

El mutismo selectivo y el autismo pueden darse de forma simultánea en una misma persona.

Esto significa que las personas con autismo pueden tener también, aparte de autismo, mutismo selectivo.

El mutismo selectivo es una condición poco frecuente pero que cuando ocurre interfiere mucho en el desarrollo diario de la persona.

Pero en el caso de las personas con autismo el mutismo selectivo se da de forma más frecuente, y es por este motivo que vamos a hablar sobre ello en este artículo.

🤔 ¿Qué es el mutismo selectivo?

El mutismo selectivo es una condición en la que el niño es capaz de hablar, comunicarse y sociabilizarse en ciertos contextos pero incapaz de hacerlo en otros.

El nombre de mutismo selectivo se puso precisamente porque en las situaciones donde la persona es incapaz de comunicarse verbalmente puede parecer que esta sea muda.

El mutismo selectivo, tal y como explicaremos más adelante, es un trastorno de ansiedad, por lo que esta incapacidad de hablar en ciertas situaciones son debidas a altos niveles de ansiedad.

Síntomas del mutismo selectivo

Los síntomas del mutismo selectivo son muy evidentes en la mayoría de los casos ya que es muy claro cuando estos ocurren.

Los principales síntomas del mutismo selectivo son los siguientes:

  • La persona habla y se relaciona correctamente en casa u otros lugares, pero no habla nada o prácticamente nada en otros contextos.
  • En los contextos donde la persona es incapaz de hablar a menudo se queda como paralizada, quieta, incapaz de reaccionar.
  • En los contextos donde la persona es incapaz de hablar, en algunos casos intentan responder a través de gestos o expresiones con la cara.

Causas del mutismo selectivo

El mutismo selectivo es un trastorno de ansiedad y por lo tanto es causado por altos niveles de ansiedad en las situaciones donde la persona es incapaz de hablar.

Lo más habitual es que el mutismo selectivo aparezca entre los 3 y 5 años, y suele tender a desaparecer o disminuir cuando el niño es mayor de 5 años.

Pero hay casos más severos donde el mutismo selectivo se cronifica y permanece durante la adolescencia y la adultez

Que el mutismo selectivo sea un trastorno de ansiedad significa que el niño es incapaz de hablar por su alto nivel de ansiedad, y no es que no quiera hablar por capricho.

Por lo tanto el mutismo selectivo no debe ser considerado como una decisión que toma el niño de no hablar, sino como una situación en la que este no puede hablar por altos niveles de ansiedad.

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💥 MUTISMO SELECTIVO y AUTISMO

Muchas veces se confunde el mutismo selectivo con el autismo, ya que las dos condiciones tienen ciertas características en común.

Es muy frecuente confundir las dos condiciones porque tanto los niños con mutismo selectivo como los niños con autismo pueden no responden a las preguntas que otros les realizan.

Los niños con autismo y los niños con mutismo selectivo también pueden quedarse callados en determinadas situaciones sociales y en otras desenvolverse de forma más adecuada.

Pero aunque estas características se den en las dos condiciones, los motivos por los que se dan en una y en otra son totalmente distintos.

Por lo tanto una misma conducta puede ser porque un niño tiene autismo o porque tiene mutismo selectivo, y la forma de trabajarlo también serán distintas.

Diferencias entre Mutismo Selectivo y Autismo

Las personas con autismo y las personas con mutismo selectivo pueden mostrar la misma conducta de ser incapaces de hablar en determinadas situaciones.

Pero la diferencia es que la causa entre esta conducta en el autismo y en el mutismo selectivo es completamente distinta.

En el caso del mutismo selectivo, como ya hemos explicado en este artículo, la causa de ser incapaces de hablar es por ansiedad.

El mutismo selectivo es un trastorno de ansiedad donde en determinadas situaciones el nivel de ansiedad es tan alto que la persona es incapaz de hablar y se queda «congelada».

En cambio, en el caso del autismo la causa de que la persona se quede callada en determinadas situaciones es debido a sus pocas habilidades en la comunicación y la interacción social.

Mutismo selectivoAutismo
Motivo por el que no hablanPor altos niveles de ansiedadPor pocas habilidades en comunicarse e interaccionar
Diferencias entre Mutismo Selectivo y Autismo

El autismo es un trastorno que afecta principalmente en las áreas de la comunicación y la interacción social, y es muy habitual que la persona se quede callada porque no sabe como interaccionar y comunicarse en esa situación.

Así pues en el mutismo selectivo la persona será incapaz de hablar por altos niveles de ansiedad, y en el autismo por pocas habilidades en comunicarse e interaccionar.

¿Una misma persona puede tener Autismo y Mutismo Selectivo?

Una misma persona puede tener Autismo y Mutismo Selectivo, y en estos casos la mejora y el tratamiento se vuelven más complejos.

En los casos donde una persona tiene autismo y mutismo selectivo significa que esta persona, en determinadas situaciones es incapaz de hablar por altos niveles de ansiedad y en otras situaciones por dificultades en la comunicación e interacción.

Por lo tanto las personas con autismo y mutismo selectivo tendrán las dificultades en la comunicación e interacción propias del autismo y los altos niveles de ansiedad social propios del mutismo selectivo.

Así pues las personas con autismo y mutismo selectivo deberán recibir la terapia propia del autismo para aprender habilidades sociales y comunicativas y también la terapia propia del mutismo selectivo para reducir los niveles de ansiedad social.

👍 Tratamiento para el Mutismo Selectivo

El tratamiento para el mutismo selectivo debe se realizado desde una perspectiva psicoterapéutica y en casos más severos también se pueden administrar fármacos para reducir la ansiedad.

Es muy importante que el terapeuta que aplica el tratamiento esté formado en mutismo selectivo, ya que se si presiona demasiado a la persona el mutismo selectivo puede empeorar.

Tratamiento psicoterapéutico

Desde la perspectiva psicoterapéutica el mutismo selectivo debe ser tratado a través de la exposición gradual a situaciones donde la persona es incapaz de hablar.

Para realizar la exposición gradual se debe realizar un listado de situaciones donde la persona se siente ansiosa y no puede hablar.

Este listado debe ordenarse desde las situaciones que le generan menos ansiedad a las que le generan más ansiedad.

A través de la exposición gradual la persona se enfrenta primero a las situaciones que le generan menos ansiedad, con la ayuda del terapeuta, y a medida que va siendo capaz de hablar en estas situaciones se pasa a situaciones que le generen más ansiedad.

Es muy importante no presionar en exceso ni exponer a la persona a situaciones que le generen demasiada ansiedad, ya que esto podría empeorar el mutismo selectivo.

Tratamiento farmacológico

En situaciones donde el mutismo selectivo es más severo y donde no se observan mejoras notables con el tratamiento psicoterapéutico se suele optar por introducir tratamiento farmacológico.

El tratamiento farmacológico tiene como objetivo reducir la ansiedad, y por lo tanto se suelen utilizar fármacos ansiolíticos.

El tratamiento farmacológico debe ser siempre complementario al tratamiento psicoeducativo, ya que este último es el más efectivo e indispensable.

La administración de fármacos siempre debe ser pautada y controlada por parte de un psiquiatra especialista.

🔵  Conclusiones

El mutismo selectivo y el autismo son dos condiciones que pueden coexistir en una misma persona.

El mutismo selectivo es un trastorno de ansiedad que impide hablar en ciertas situaciones debido a altos niveles de ansiedad, mientras que el autismo se caracteriza por dificultades en la comunicación e interacción social.

Aunque comparten algunas similitudes en la conducta de quedarse callado en situaciones sociales, las causas subyacentes son distintas.

Es importante destacar que una misma persona puede presentar tanto autismo como mutismo selectivo, lo que requiere un tratamiento integral que aborde tanto las habilidades sociales y comunicativas como los niveles de ansiedad.

El tratamiento psicoterapéutico, a través de la exposición gradual a situaciones desencadenantes, es fundamental en el manejo del mutismo selectivo, mientras que en casos más severos se puede considerar el tratamiento farmacológico como complemento.

En definitiva, entender las diferencias y similitudes entre el mutismo selectivo y el autismo es crucial para brindar un enfoque adecuado y efectivo en el abordaje de estas condiciones.

📚 Bibliografia sobre «Mutismo selectivo y autismo»

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